La sanidad maltratada

El día 1 de Noviembre de 2018 comencé esta serie de artículos de opinión bajo la sombra de El Dolmen, y lo hice dando las gracias a los profesionales de la Sanidad Pública, gracias a ellos pude superar una crisis de esas que, las circunstancias que nos trae la vida, puede significar un vuelo hacia el infinito o un volver a empezar, eso sí controlado por esos magníficos profesionales, que nos cuidan en cualquiera de las situaciones, no digamos en época de pandemia como la que hemos pasado y en la que, durante el confinamiento, salíamos al balcón, todas las tardes, a aplaudir su entrega y profesionalidad. En aquel primer artículo comparé a estos profesionales con los titanes que levantaron cada uno de los dólmenes que se reparten por la geografía patria, esa en la que ahora estos profesionales están siendo maltratados por los poderes públicos, que a las claras están desviando, como en otras ocasiones, las políticas públicas a intereses privados. El dolmen, monumento funerario megalítico, será testigo una vez más de una muerte, en este caso de la sanidad pública, uno de los tesoros de los que podíamos disfrutar en este país y que los políticos que tienen el deber de potenciarlo y protegerlo, para eso los elegimos, van a llevarlos a la debacle. Mi apoyo incondicional a los profesionales de la Sanidad Pública.