La intuición que no cesa

10 ago 2018 / 08:49 H.

Soy agnóstica teísta la mayor parte del día y algunas veces, también por la noche. O lo que es lo mismo. Creo en lo que me conviene y cuando me interesa. ¿Eso me convierte en creyente? Pero aún sin atreverme a definirme, creo firmemente en la intuición. A pesar de que se piense que es una cualidad casi mágica, algo irracional y diametralmente opuesta a la razón que nos incita a tomar decisiones sin tener todos los datos y sin saber cuál será exactamente el desenlace, considero que inconscientemente, estamos razonando aunque no entendamos el mecanismo que nos ha llevado a tomar esa decisión y aún no sabiendo explicar el porqué de esa acción. El “porque sí” es la respuesta lógica cuando tomamos una decisión basada en esta cualidad. En muchos casos no he hecho caso a mi intuición y me he equivocado. Pero a partir de ahora, eso va a cambiar. Porque creo que soy muy intuitiva. Bueno, también un poco perezosa, y la intuición es rápida y despierta la curiosidad mientras que el pensamiento racional es lento y laborioso. Si. Definitivamente, soy muy perezosa. ¿Qué pasa? Algún defecto tenía que tener.