La era postcovid

Todo pasa y todo llega, pero lo nuestro es pasar, pasar haciendo caminos, caminos sobre la mar...”, nos canta Joan Manuel Serrat. Supongo que con lo bien que piensan hacer los políticos las cosas y los propósitos de enmienda tan espectaculares que prometen dejándonos las residencias de ancianos, eufemísticamente llamadas en otras épocas “de la tercera edad”, de dulce y expeditas para que los pobres viejos transitemos en nuestra última etapa de la vida de una manera honrosa y reconfortante, lejos ya del plan cuasi carcelario y súper tutoriado, que padecieron al principio de la pandemia, puesto que llegaron a no tener ni derecho a recibir asistencia médica, pues era mejor elegir a un joven para que se curase del dichoso virus mientras que un viejo era conveniente dejarlo morir antes que después. Fue muy duro todo aquello, ¿verdad? Ya no nos debemos preocupar porque todo eso lo van a cambiar para siempre nuestros políticos y los protocolos serán maravillosos, teniendo en cuenta el trato humano y empático que se merecen nuestros conciudadanos mayores. ¿Habrá que creérselo o tendremos que asistir nuevamente al espectáculo dantesco que vivieron residentes y familiares por aquel entonces?