Influir en el precio

    19 jun 2019 / 12:57 H.

    Estamos estas semanas a vueltas en cómo poder obtener una modificación al alza en el precio de nuestro oro líquido, pero, como siempre, cometiendo el mismo error: que otros me lo apañen y me lo arreglen o, en su caso, lo arriesguen. Pues no, opino yo. Ni la Administración ni terceros son los que tienen que sacarnos las castañas del fuego. A mi humilde entender —no soy ajeno al sector oleícola—, el productor no va a influir nunca en esos ratios como está constatado en todos los sectores alimentarios. El que influye en el mercado es que el distribuye, comercializa y vende directamente al último eslabón; tres aspectos que aquí se omiten una y otra vez, pues, o apostamos por controlar la distribución, la comercialización y la venta final, o esto no tendrá nunca solución. ¡Ah! Pero eso cuesta, y, seamos sinceros, ese coste, al agricultor/a jiennense, no le gusta ni mencionarlo. Experiencias como la del campo almeriense, que invirtió hace décadas en los canales de distribución y transporte, creando, además, una red de comercialización propia y directa con el exterior, dio frutos que, durante años, supusieron la mayor renta agraria del sur.