Íbamos
a salir mejores, ja

Recuerdan, allá por la primavera y el verano de 2020 cuando se abrió una gran esperanza colectiva, de esta saldríamos mejores como sociedad, como seres humanos, se oía en todos los foros. Todo se volvían aplausos, reconocimientos, balcones enteros repletos del sonido de las palmas, muchos himnos y banderas por doquier. Salimos mejor de lo que creíamos de la pandemia gracias a la ciencia que nos puso unas vacunas que obraron el milagro en lo que a salud física se refiere, pero no, mentalmente no ha habido avance positivo alguno. Habrá que reconocer, de una vez, que la especie humana no es tan buena como aparenta, tan solidaria como borbotean sus palabras. Cuando empezábamos a remontar se nos olvidaron los sanitarios, los agricultores y ganaderos, todos los colectivos que se dejaron la piel en primera línea del frente para que nos fuese más llevadero el duro trance de transitar con una pandemia brutal, cruel y mortífera. Todo el debate se centró en las pérdidas económicas quedando aparcados, cuando no olvidados, los miles y miles de muertos. ¿Mejores? Ya te digo yo que no.