Horas bajas en Zarzuela

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Ha empezado este año con temperaturas muy bajas. Un aire huracanado y cortante nos asiste, aunque para frío, frío, Madrid, por los Montes de El Pardo, lugar donde está enclavada la Zarzuela, el bonito palacete donde tiene su residencia los actuales reyes de España, Felipe y Letizia, la temperatura la imagino gélida. Creo que nunca desde que se unieron en matrimonio habrán tenido esa sensación inhóspita como la que están pasando. Y es que una nube negra y espesa se extiende sobre sus cabezas. Una serie de circunstancias se les han disparado de índole variado empañando esa imagen de familia feliz que nos transmitían. Jóvenes, sanos y padres de unas bonitas niñas. Con sus trabajos y ocupaciones, como todo el mundo tenemos (de esto no se escapa nadie, el pan nuestro de cada día es tan importante y necesario como el seguir respirando). Pues bien, así y todo la vida les da de beber malos tragos. Parece que una mano negra estaba esperando que su hija Leonor cumpliese la mayoría de edad para que todo tomase una vuelta de campana y un color completamente opaco en sus vidas y que el resultado fuese macabro. La prensa del país toma nota con seriedad y buen tono. Las revistas del colorín y los youtubers... señor, señor, qué espanto.

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