Hierbas y malezas

Esta primavera lluviosa dio abundantes pastizales con gramíneas, avenas, amapolas, ballicos, juncias, tomillos, jaras, romeros, jaramagos y otras plantas silvestres. Los agricultores con sus picadoras de hierba tienen las cubiertas vegetales de los olivares bien recortadas. Las frondosas sierras de Jaén necesitan también un desbroce y limpieza anual de suelos y malezas. En algunos pueblos de Jaén aún se ven rebaños de ovejas con sus pastores, apurando las hierbas de caminos y ha-zas de tierra de barbecho, necesaria ganadería extensiva, también intensiva, que limpia las tierras y sierras de hierbas y las abona con su estiércol, reduciendo la materia seca de los fuegos en verano. Cuando las hierbas se secan ya antes de “los calores de san Juan, que quitan vino, aceite y pan”, refrán oído a mi padre, entonces son material inflamable y peligroso para los fuegos. Es muy ecológico y preventivo contra los fuegos estivales que los pastores lleven sus ganados a pastar por caminos, ha-zas, riberas, montes y sierras. Sin la burocracia europea y su fiscalidad, los ganaderos ayudarían mucho con sus rebaños en todos los sectores económicos.