Rapero Hasél

Miles de veces es muy duro que alguien vaya a la cárcel. En este caso, era algo esperado para el rapero Hasél desde hace años. No va a prisión por cantar. No va a prisión por hacer versos o rimas. Va a prisión porque ha acumulado varias condenas: allanamiento, desobediencia y amenazar a un testigo. Ni los insultos al Jefe del Estado o a las Instituciones nos muestran al personaje en toda su dimensión. Este hombre no solo es músico o cantante, dedica a menudo su vida a cometer delitos por los que todos los ciudadanos pagan. Una pincelada de su categoría es lo que dijo del alcalde de Lleida: “..te mereces un tiro...te apuñalaré...te arrancaré la piel a tiras”. Este músico, este artista cuyo discutible talento lo ha hecho famoso más allá de nuestras fronteras y es elogiado por Almodóvar, es un miserable. Dice en sus canciones que la policía española mata y tortura, glorifica el terrorismo y bendice el “tiro en la nunca”. La prisión la busca como una medalla y le servirá para recapacitar. En España, tiene la suerte que no tendría en EE UU, va a poder rehabilitarse y poner a prueba su creatividad. Esperamos que sin privilegios.