Felipe de Neve

17 mar 2016 / 09:20 H.

Cada uno de nuestro pueblos cuenta con historia y personajes ilustres que, o bien cayeron en el olvido, o simplemente la desidia institucional y social los hizo anónimos. Cual corriente habitual, no somos fieles seguidores de nuestro pasado, abocándolo al cruel e injusto olvido. Pocos saben que el fundador de la actual Los Ángeles, California, fue un bailenense, Felipe de Neve. Fue bautizada como El Pueblo de la Reina de los Ángeles y, posteriormente, como El Pueblo de Nuestra Señora la Reina de los Ángeles de la Porciúncula. Por comodidad lingüística, y sé esa costumbre humana de ir lo más fácil y cómodo, derivó en su nombre actual. De Felipe de Neve no hay en su Bailén natal más que una terraza con su nombre en un bar de la localidad. Nadie ha querido, desde los diferentes gobiernos locales, indagar y dar realce a alguien que allende los mares, en aquel gran emporio de la California actual, si lo tiene. Es justo poner en valor y enraizar la historia con la ciudadanía. En nuestro pasado está gran parte de lo que hoy somos. En este caso hay, a mi entender, una torpeza institucional enorme. No haber contactado con el Gobierno de aquella ciudad para hacer un hermanamiento, para divulgar más y mejor el nombre de Bailén, por añadidura de Jaén, nuestro Mar de olivos. Comunicarse, crear vínculos, no puede conllevar más que un plus añadido de relaciones culturales, y por qué no comerciales. No estamos sobrados de nada, ni debemos menospreciar ninguna de las posibilidades que la historia nos regaló. Felipe de Neve, nació en Bailén y lo llevó a honra durante toda su vida. Ayuntamiento y Diputación debieran compensar el olvido histórico con alguna acción en positivo. Y si encima tenemos la suerte que puede acarrearnos que este aventurero fundase lo que es hoy una de las ciudades más próspera del mundo, adelante, esforcémonos y hagamos algo. No sería el aceite de oliva virgen extra mal agente diplomático para desplegar puentes, ni nuestra magnífica alfarería. Los estadounidenses valoran mucho la poca historia que tienen y seguro acogerían con agrado la iniciativa.