Estoy
hecha un lío

Soy una niña de diez años y curso quinto de Primaria en un colegio andaluz. Me preocupa que todos los años, ante la llegada del mes de noviembre, se me hace la cabeza un lío entre lo que oigo, practico y veo en mi cole y lo que escucho y palpo en casa de mis padres y abuelos; ya que en mi clase y cole todo es Halloween, convirtiendo esta fiesta pagana, importada de EE UU, en un auténtico carnaval al uso, mientras que en mi casa, mis familiares más mayores, la critican y denigran abiertamente, pues argumentan que han edulcorado la fiesta cristiana de Todos los Santos y Difuntos, convirtiéndola en un infundio o engendro monstruoso, haciéndonos cada año un lavado de cerebro impresionante. Y yo me pregunto: ¿No podrían fundir ambas tradiciones para obtener más provecho y que tuviésemos más calibrado nuestro juicio al llegar a estas interesantes y notables festividades otoñales? Ya no soy tan pequeñita como antaño ni tengo visos de tonta, por eso me gustaría que se pusiesen de acuerdo todos, los de mi cole y mi casa, así como la propia sociedad, para que, cuando lleguen estas entrañables efemérides, no se me haga la cabeza un lío...