Estado de insomnio

    28 jul 2021 / 16:08 H.
    Ver comentarios

    S olo faltaba el calor a la pérdida del bienestar ante la infelicidad instalada en el día a día. Las noches se han convertido en enemigas cuando has perdido la esperanza de encontrar pasión en horas que hubieran ser destinadas a ello, y ni el hielo que recorre la casa saliendo desde la habitación al salón, refresca el aire solano que sopla entre los chopos de enfrente. En verano el “no sueño”, con causa, te golpea a las doce de cada madrugada presentándose en bucle con todos los demonios que te atormentan, en especial cuando se ha perdido la esperanza de recuperar lo que tanto deseas, que tuviste y solo ya es un recuerdo de algo que casi no conoces. Las noches se eternizan y el despertar llega antes cada vez, el año pasado eras a las siete treinta, ahora a las siete, y así hasta donde quiera aguantar el alma y el corazón. Se te marcan las arrugas cada vez más, mientras lo imposible de ser recuperado yace ajeno a ti, aún más lejos, más anhelado, más perdido. Ni las sombras se asemejan a aquello que no te deja dormir. Podría también, porqué no, ser declarado inconstitucional este estado de hundimiento, o venir otro gobierno a rescatar al asolado pueblo.

    Articulistas