En 2017, ¿pacto educativo?

28 dic 2016 / 12:07 H.

La transición a la democracia en España resultó beneficiosa para todos y asombró al mundo, pero dejó algunos flecos que después no han sido resueltos por una razón u otra. Una de estas asignaturas pendientes es el imprescindible pacto educativo, un marco eficaz para organizar la educación en todo el territorio nacional sin que haya que asistir a su derogación cuando cambie el gobierno. Para alcanzar este objetivo sólo hay un camino: el consenso que permita una redacción de la ley en la que todos se sientan representados. Además, hay algunas circunstancias que hacen necesario este pacto: en primer lugar, el alto porcentaje de fracaso y/o abandono escolar, que deja a los alumnos sin preparación en un mundo complejísimo; por otra parte, la sociedad del futuro requerirá que los ciudadanos que aspiren a encontrar un empleo estén preparados no sólo para acceder a una rama o trabajo determinado, ya que muchos querrán acceder a empleos que hoy no existen. Esto quiere decir que la educación tendrá que preparar al individuo para adaptarse a circunstancias imprevisibles, es decir, una formación polivalente. Y, finalmente, necesitamos el diseño de una carrera docente, con una formación inicial completísima y un amplio periodo de prácticas supervisadas por tutores verdaderamente expertos y atentos al proceso seguido. “Además de la formación inicial del profesorado, que debe ser equiparable a la que ya se proporciona a los aspirantes a docente en los países europeos más avanzados, la Ley de Educación que surja del consenso previo de todos los representantes de los españoles, debe contemplar otros aspectos hoy fundamentales como la necesaria formación permanente a lo largo de toda la vida, no sólo en las edades juveniles, necesidad que surge de las características de la sociedad actual, que progresa y cambia a una velocidad trepidante, antes desconocida. Y, como es lógico en un mundo que cada vez dispone de más maquinaria sofisticada que realiza tareas antes reservadas a los humanos, será necesario educar a los niños, jóvenes y adultos actuales y a los futuros para que aprendan a disfrutar plenamente de las posibilidades y beneficios que el tiempo libre y las actividades de ocio pueden proporcionarles.