Empezó la liga

Esto de que la gente se vaya de vacaciones y uno se quede en su casa no pone las cosas fáciles a la hora de plantarse ente el ordenador para escribir la “brisa” de cada día. La falta de actividad se hace notar a la hora de generar noticias que merezcan un comentario. Es verdad que temas no faltan, pero es que cansa que casi siempre sean los mismos: desaciertos políticos, violencia machista, estafas... Ahora el que está en tela de juicio es el famosísimo Plácido Domingo, sobre quien pesan varias acusaciones de acoso y abusos sexuales. Eso sí, está el tema de Onda Jaén que parece que nadie sabe por dónde cogerlo, demorando una solución satisfactoria que sea buena para sus trabajadores. Si el Ayuntamiento archiva este asunto en el mismo archivador donde guarda lo del tranvía, la solución va para largo. La única noticia nueva es que la Liga de fútbol ha dado comienzo y lo ha hecho demostrando una vez más que en esto del fútbol no sólo vale el dinero y que la pretemporada sólo sirve para ajustar las piezas y confeccionar el equipo pero nunca para ser anunciadora fiel y veraz de lo que puede ser después el campeonato. Ya ven el batacazo que se ha llevado el Barcelona perdiendo el primer partido oficial después de la notable pretemporada realizada. El equipo barcelonés, que preside Josep María Bartomeu, sin Messi pierde mucho potencial, como consecuencia de confeccionar una plantilla sólo pensando en la figura principal, sin estar inteligentemente compensada. Los millones consiguen nombres notorios que a lo mejor no son los más idóneos para el conjunto. Lo mismo le sucede al Real Madrid, aunque éste ni tan siquiera ficha, quizás porque no sepa dónde poner su dinero. A pesar de ello, el cuadro merengue, que hizo una deprimente pretemporada, tuvo mayor fortuna en su debut liguero, aunque no mejoró demasiado su imagen. Y digo esto pensando en el Real Jaén, el equipo que más nos duele por estos pagos del Santo Reino. Sigo pensando que la marea suscitada por el desencanto de la anterior campaña y el inesperado cambio de presidente, se ha calmado, sobre todo porque la plantilla se viene mostrando, en lo visto hasta ahora, con serenidad, con una línea seria de compromiso y está dejando ver que no es tan negativa, ni mucho menos, como los más ofuscados han dicho. Y la prueba es que los abonados siguen respondiendo positivamente. Después, la Liga será la que pongan las cosas en su lugar.