El síndrome del Procusto

El miedo a reconocer la superioridad del otro en cualquier campo, ya sea personal, profesional o social, que lleva al que lo padece a maquinar contra el que considera superior, a malmeter contra él y manipular a todos los que tiene alrededor para unirlos en su cruzada personal. Este síndrome está aquí desde siempre, pero nunca había encontrado una figura cercana a la que aplicarle esta leyenda,hasta ahora. Este Procusto no sé si ha encontrado aún a su Teseo, pero todo llegará. Procusto mítico tenía una cama que agrandaba y achicaba a su antojo para matar a sus huéspedes y Procusto actual tiene un cortejo que le hace la cama a él. Pero este Procusto nuestro no sabe que su cama está deshecha, y que ya no quedan muchos dispuestos a hacérsela a cambio de nada. Este personaje es capaz de adular a los que considera que no son dignos rivales para él a cambio de que se sumen a su maquinación, y los cazurros de los que se rodea, que solo quieren hacer leña del árbol caído, creen, en su infinita ignorancia, que les está haciendo un favor a ellos. Este personaje llega a mentir, a confirmar calumnias a sabiendas, a mentir bajo juramento y se cree a salvo escudándose en unas leyes sacadas de la manga de unos cuantos pseudo jueces de la causa. Pero como dice el refrán, a todo cerdo le llega su San Martín.