El Open Arms

    28 ago 2019 / 10:43 H.

    Mucho se ha hablado y escrito en estos últimos días sobre el Open Arms, y lo que resulta sorprendente es que casi todo el mundo sabe hoy tanto de la labor que realiza el Open Arms que, parece que se han criado en la borda o en la proa de este barco del que casi nadie había oído hablar antes, hasta hace unos días. Y es que si algo sobra actualmente en el mundo son los típicos “sabeores” o “sabelotodo” que de siempre han existido, pero más actualmente debido a la facilidad para acceder a información, veraz o no veraz, eso sí, que tenemos. Pero lo triste de este asunto es que uno ya sabe lo que en tertulias, redes sociales, en el chiringuito de la playa o en otros foros, va a opinar cada uno teniendo en cuenta sus simpatías políticas y el medio de comunicación que lea o escuche y al que siga cual oveja sigue a su pastor. Resulta vergonzoso que se politice una vez más un asunto que, en realidad, a muy pocos de los que opinan les importa ni les afecta. Lo único que sabemos con seguridad, es que en el Open Arms han estado embarcadas más de cien personas sin un futuro ni un lugar en el que poner pie en tierra, y que el ser humano puede ser tan miserable que, hasta de este tema, quiere sacar beneficio.