El mejor ambiente

Hoy, 5 de junio, es declarado por Naciones Unidas: “Día Mundial del Medio Ambiente”. Cada vez me extraño menos al leer tweets o recibir mensajes de los apóstoles del negacionismo y, puedo llegar a entenderlos cuando proceden de extremistas religiosos, cargos políticos ultraliberales o grandes marcas multinacionales, porque el enemigo conoce el sistema y tienen, normalmente, un trasfondo económico oculto; pero lo que me inquieta es que ese mensaje vaya calando en mentes débiles de la sociedad general debido, fundamentalmente, a la propaganda barata de ultraderecha, carente de rigor científico. Casi el 99% de la comunidad científica mundial avala la crisis climática y de biodiversidad que sufrimos, por ende una transformación segura y justa hacia un planeta manejable requiere una acción colectiva urgente de múltiples actores para mantener intacto el soporte vital del planeta. El cambio climático es una amenaza que genera bastante culpabilidad en el público en general, y es más fácil ser un “quietista climático”, pero no podemos confiar en que sin hacer nada, todo terminará por solucionarse. Nosotros somos parte del problema y debemos ser parte de la solución. Respetar la biodiversidad es la demostración más profunda de amor que puedes tener con tus hijos y la generación venidera.