El humor del absurdo

18 ene 2019 / 12:02 H.

Estas Navidades hemos recibido una postal clásica, en el anverso, la imagen del Niño y un deseo; en el reverso un artículo de Don Venerando, publicado en La Codorniz el 2/XII/1961. Cuando Miguel Mihura se hallaba en San Sebastián estaba al tanto de lo que se publicaba en Italia a través de la embajada. Autores como Giovanni Mosca o Giovanni Guareschi publican en el Semanario Bertoldo, en un nuevo estilo de humor, que se ha querido llamar “Humor del absurdo”, al que Mihura considera excepcional. Para poder desarrollar este humor en su revista necesita la aportación de un humorista jiennense excepcional, Antonio de Lara Gavilán “Tono”, cuyo ejemplo más significativo es la primera portada de Tono, publicada en La Codorniz. “Una señora con dos niños le dice a un señor que pasa a su lado: ¡Caramba, don Jerónimo! Está usted muy cambiado. / Es que yo no soy don Jerónimo. / ¡Pues más a mi favor!” Tanto “Tono” como Edgar Neville siguen publicando en La Codorniz numerosos artículos de este nuevo estilo humorístico, pero al público le atraía las historias que Carlo Manzoni publicaba con don Venerando. Los lectores y la crítica en general consideraban que este nuevo estilo de humor, era más intelectual y como paradigma del mismo eran dos autores que habían conseguido una fama internacional, son sin duda Antonio de Lara Gavilán en España y Carlo Manzoni en Italia.