Docentes premiadas

Hace escasos días, el Ayuntamiento de Jaén celebró su primera edición de los premios a la docencia de nuestra ciudad, que, por cierto, tuvieron acento femenino. Alabo la iniciativa de la Concejalía de Educación de ofrecer un reconocimiento municipal a la labor educativa de las docentes y entidades premiadas, tras haber visitado todos los centros de Jaén capital. Se trata de un premio que nace con afán de continuidad en el tiempo. El acto de la entrega de premios resultó ser entrañable y lleno de emotividad, que consiguió que los presentes hiciéramos un recorrido por nuestros recuerdos infantiles, rescatando de la memoria, olores y vivencias escolares. A nadie se nos escapa la ardua tarea
que, día a día, tiene que afrontar todo docente que se precie, si no quiere
dejar morir la pasión que le empujó a elegir la profesión que desempeña. Pero, además, si los alumnos en cuestión, están dotados de capacidades diferentes, físicas, sensoriales, psíquicas e intelectuales, sin límite de edad, el trabajo del maestro llega a ser insuficiente si no va acompañado de una dosis extra de cariño, paciencia y empatía. La seño Blanca Aguilar y el Centro de
Formación Integrar, capitaneado por Lucía Ruiz, han sido premiadas por la innovación y mejora de la enseñanza y aprendizaje, en el primer caso, y por el modo que tienen de inculcar a sus
alumnos los valores de respeto, generosidad y solidaridad, y, en definitiva, la convivencia educativa, en el segundo. Tiza de Oro y Mochila de Plata, respectivamente. Que, socialmente, se valore
el esfuerzo diario,
debe ser un revulsivo que compensa tanto
sacrificio y dedicación. Mi enhorabuena a ambas premiadas y mi ánimo a continuar desafiando las dificultades que se presentan en el desempeño de tan loable tarea. Los chicos, sus familias y toda una sociedad jiennense os ha reconocido el beneficio de vuestras actitudes mentales.