Demasiado Madrid

El pasado dos de mayo, también se lio. La conmemoración de esta fecha por parte de la Comunidad de Madrid, ha dado lugar a un publicitado incidente debido a que el gobierno madrileño, no ha permitido subir a la tribuna presidencial a un ministro del gobierno de España. Se aducen razones de protocolo, hablando incluso de provocación y deslealtad. Yo creía que bloquear al Gobierno de España en actos organizados por las autoridades autonómicas, era cosa de los independentistas catalanes, pero parece ser también un rasgo de los conservadores madrileños; en fin, un paso más en los usos de la mala política.

Comento este incidente, porque es un ejemplo claro e inmediato de algo que a muchas personas nos produce indignación, y es el desproporcionado alcance de las noticias sobre lo que ocurre en Madrid, respecto a lo que acontece en
el resto de España. Los medios de comunicación nacionales (me refiero a los considerados “serios”, no a los creados directamente para difundir bulos o consignas partidistas), exacerban la información madrileña mientras minimizan o silencian la actividad en el resto del territorio español.

Es algo muy frustrante y particularmente relevante a la información referida a las actuaciones políticas en esta campaña electoral. Conocemos hasta el hartazgo las opiniones de los líderes de los partidos políticos —que por cierto no se presentan a estas elecciones— así como las de la presidenta de la Comunidad de Madrid y la del alcalde de la capital de España. Es innegable que Madrid es muy importante, pero es sólo una comunidad autónoma (uniprovincial por cierto) de entre las doce comunidades en las que hay elecciones, y que la capital —también importantísima— es sólo un ayuntamiento más de los ocho mil que se someten a las urnas en este mes de mayo. Pero se habla sólo de éstos.

Es más, estoy segura de que la mayoría de los votantes distraídos tienen más información de estos políticos madrileños, que de los que se presentan en su propio municipio o comunidad. O sea, miles de candidatos y candidatas tapados por las voces que nos ofrecen sin parar, los informativos nacionales.

No solo es en la política sino en cualquier motivo de información; hay días que viendo u oyendo las noticias parece que “fuera de Madrid”, no ocurre nada en España, situación que también se extiende en las redes sociales.

Creo que el Estado de las autonomías ha desconcentrado bastante a la Administración acercándola al ciudadano, bastante poco al poder económico y social y absolutamente nada a la información. Ello produce un efecto perverso en las percepciones de la realidad a la que gran parte de las personas observamos como ajena y artificialmente ruidosa. No sé, pero desde provincias se ven las cosas con más sosiego y tranquilidad y menos confrontación.

Tal vez y sin ánimo de ofender, sea necesaria más España y menos Madrid.

Posdata: Bienvenido el acuerdo marco salarial, que es una buena noticia que nos afecta por igual a todos, independientemente de a quienes voten, o dejen de votar.