De gatitos y lecciones
Está aquí, como el bochorno de estos días, pegadizo, plomizo y somnoliento. Nos avisaron que empezábamos de nuevo y es cierto. El “déjà vu” electoral arranca con la desidia contagiosa de los propios contendientes. Una desgana que no obedece solo a la forzada economía de campaña, sino al mensaje de hartazgo militante que la ciudadanía lanza a los partidos. Mensajes en una botella, con un solo destinatario. La pieza de más valor es la del indeciso. Son muchos, son legión. Y están a la expectativa, ajenos al ruido y rumiando qué hacer. Ese gran banco de votos a la deriva tiene dos semanas para buscar un meandro donde detenerse. De ellos dependerá consolidar la corriente victoriosa y demoscópica del PP, elevar la talla histórica del sorpasso o echar un madero al naufragio, de momento, del PSOE. Todo es posible. Del río revuelto y desde la orilla, Ciudadanos sabe que no entra en la pesca del gran salmón, pero puede saborear un lomito en función de la jornada. Con un perfil de campaña tan bajo, lo importante, sobre todo es no cometer grandes errores. Los entremeses mediáticos, mientras, dan que hablar que es de lo que se trata. En el PP, Moragas y compañía, renuevan la tradicional imagen carca con música de reguetón (perdón por el oxímoron) y con “gatitos”, que es una de las piedras de roseta de los virales de internet. No falla, colocas un minino en el mundo digital e, inmediatamente, bajas la guardia. Mouriño no entendía de elegancias gatunas. Estas distracciones son carne de cañón, el montaje torticero está a la vuelta de la esquina, y acaba por tener casi la misma visibilidad que el original. Como el vídeo de Ciudadanos, sus arquetipos y la barra del bar. Me confieso, no obstante, adicto a esas monodosis creativas que en tan poco pretenden contar tanto. Destacado ese gran acierto de darle la vuelta al concepto de “programa” de Julio Anguita y ponerlo bonico en formato Ikea. Unidos-Podemos tienen testadas una batería de buenas ideas, los gatitos, de hecho ya le funcionaron a Garzón. En viralizar mensajes y ganar la plaza física y la virtual (redes sociales) son potencia, pero Errejón sabe que con eso no llega. De ahí primero el abrazo del oso a Izquierda Unida y la paulatina subida al caballo de la socialdemocracia. El cielo griego, por ejemplo, se conquistó también con retardo y fagocitando al histórico PASOK. Susana Díaz lo sabe.
VOLAR ALTO DESDE JAÉN. Tres empresas en las antípodas del tópico productivo jiennense representarán a Jaén como candidatas a los premios ALAS que promueve Extenda como acicate a la exportación desde Andalucía. Ortiz Red, Liderkit y Taghleef Industries (antigua Derprosa). Diseños de zapatos exclusivos, en Linares; Carrocería de vehículos, desde Guarromán, y producción de film de polipropileno para artes gráficas, en Alcalá la Real, respectivamente, como exponentes de un tejido productivo que busca negocio en todo el mundo. Estos importantes galardones están en su XIII edición y en todos estos años Jaén nunca acogió la gala final. Será que la provincia coge a desmano de las rutas... del poder o que aquí, como en campaña electoral, solo se viene a recoger votos. Pero seguro que habrá una respuesta política sensata y medida que explique que en doce años Jaén y sus empresas no hayan estado en la foto final. Estas empresas son una punta de lanza de todo lo que se hace aquí, otras abrieron camino antes. También desde nuestro pilar productivo, el aceite de oliva, se conquista el mundo y personas como el exrector Manuel Parras, Medalla de Oro de la Universidad de Jaén esta semana, son un ejemplo de cómo desde el conocimiento y el trabajo con materia prima jiennense se pueden dar lecciones desde Jaén para todo el mundo.