Cordones sanitarios

04 mar 2019 / 16:07 H.

Está de moda hablar de cordones sanitarios. Poco que ver con la salud democrática. Se trata de formalizar pactos excluyentes que impidan gobernar al adversario político. El primer “cordón sanitario” se materializó en España en diciembre de 2003. Fue el denominado “Pacto del Tinell” catalán. Firmado por socialistas, republicanos y comunistas, se proponía excluir al PP —que entonces gobernaba España con mayoría— de cualquier institución de gobierno, ya fuese estatal, autonómica o municipal. Se comprometían los firmantes a excluirlo, aunque fuese la lista más votada. Complemento del mismo sería el estratégico discurso guerracivilista que asociaba al PP con Franco y que difundía las bondades republicanas frente a las crueldades del bando nacional, allá por 1936... Es el discurso sectario, lo que después se ha denominado lo “políticamente correcto”. Tras la moción de censura para “desalojar al PP de las instituciones”, el 5 de febrero de 2019, Torra hace público un documento secreto que provoca el adelanto electoral. El de las famosas veintiuna exigencias. Una muy llamativa: iniciar un proceso de desfranquización y de un debate sobre la monarquía. En definitiva, un plan para acabar con la Constitución, volver a 1931 y alimentar los enfrentamientos internos entre españoles. Mal asunto.