Comienzos

23 oct 2018 / 12:00 H.

Los principios son tediosos: cuesta mudarse de casa o de trabajo, iniciar una nueva amistad, poner la primera palabra de la famosa hoja en blanco.... Son momentos en los que se tiene que poner energía y voluntad. Lao Tse decía que un viaje de mil millas comienza con un solo paso. ¡Cuánta razón! Pero, ¡qué difícil iniciar la caminata! Sobre todo cuando el ánimo no acompaña. Un nuevo curso opinando en estas páginas, abrir una ventana a la vida, compartir pequeños retazos de alegría, o de lastre, según el momento. Este volver de preguntas íntimas: por qué o para qué hacerlo. A menudo nuestro esfuerzo para que todo fluya, resulta baldío. Te sientes, en parte, responsable de las injusticias que no cesan y cargas con la muerte de la inmigración, con la irracionalidad del maltrato a mujeres; parricidios; con los políticos y políticas irresponsables; con deslealtades en lo personal, en lo familiar. Lo que ocurre en el mundo no puedes cambiarlo con un granito de arena. Pero sí colaborar para mejorar lo más familiar, lo más cercano. Luego piensas, todo comienzo es renacimiento, renovación, vida. Leo al Dalai Lama: “No dejes que el comportamiento de los demás destruya tu paz interior”. Sigamos, pues.