Celebración de la poesía

Con el lema “Jaén, capital de la poesía”, se está celebrando por primera vez en Jaén la Semana Internacional de la Poesía. La Diputación Provincial de Jaén presenta, de manera totalmente gratuita, un evento literario de magnitud internacional en el que se darán cita los mejores poetas jiennenses, andaluces y españoles, coincidiendo con el Día Mundial de la Poesía, el 21 de marzo, y la llegada de la primavera. Además, nos visitarán destacados poetas mexicanos y colombianos, aportando ese matiz fundamental para nuestra lengua. En la Semana Internacional de la Poesía circularán por la ciudad de Jaén las voces más relevantes y reconocidas del panorama poético contemporáneo, combinando mesas de lectura poética, conferencias, diálogos con los autores, actuaciones poético-musicales, y la presentación del número 21 de Paraíso. Revista de poesía. Nunca antes se había celebrado algo así en nuestra provincia, una fiesta extraordinaria y una oportunidad. Jaén se convierte así en la capital de la poesía. Los eventos se realizan en el Centro Cultural Baños Árabes, en el Palacio de Villardompardo, desde el pasado lunes 20 hasta mañana viernes 24 de marzo, ambos días inclusive, a partir de las 18:00 horas. Este tipo de eventos se suma a otras iniciativas que desde la Diputación se están llevando a cabo desde hace ya años. Para los no iniciados, la poesía parece una serie de palabras difíciles y truculentas, retóricas e impostadas, pero no debe ser así. Por supuesto, hay poesía más fácil y otra más difícil, poesía para muchos y poesía para todos, podría decirse. Pero lo que de verdad hay es poesía buena y poesía que no lo es. En ese sentido, suele haber mucha confusión cuando no se conoce el género, y habitualmente se culpa a los poetas de que la lírica sea oscura o hermética. La poesía es un lenguaje especializado, qué duda cabe. Es el contrapunto de la realidad. En estos tiempos de prisas y velocidad, ofrece esa palabra lenta y reflexiva que nos ayuda a mirar las cosas de manera diferente. Pero ¿queremos ver las cosas de diferente manera? He ahí la cuestión. En este mundo de instantaneidad nos hemos acostumbrado a que nos digan qué tenemos qué pensar, decir o repetir. La poesía es un espacio de lentitud y meditación. Es la palabra que se sale de las corrientes de opinión predeterminadas, de las corporaciones y los grupos de presión mediáticos. En definitiva, del sistema. Es el tiempo de la rebeldía, la resistencia y la mejor manera de aprender a decir que no, para que no nos controlen ni nos digan qué debemos pensar u opinar, qué debemos decir o incluso qué debemos sentir. Porque hasta eso nos dicen. La poesía nos devuelve a nosotros mismos y nos conecta a los otros, comprendiendo el dolor de los demás y sus alegrías, compartiendo sus emociones y haciéndolas universales. Aunque cada uno de nosotros seamos únicos y especiales, todos pertenecemos a una sola humanidad y algo nos une, por remoto que sea. Un vínculo colectivo hace que afloren los sentimientos como territorios compartidos y no de exclusión, porque se trata de encontrar ese común denominador que nos enlaza, frente a quienes nos quieren atomizar como individuos aislados y desligados. La poesía combate eso desde dentro, es la pólvora que hace estallar todo eso. Es lo más necesario, lo que no tiene nombre. Son gritos en el cielo, y en la tierra son actos.