Carta a los Reyes Magos

    27 dic 2021 / 16:55 H.
    Ver comentarios

    De antemano sé que no voy a conseguir todo lo que pido a los Reyes Magos, porque en esta mirilla pido demasiado. Por pedir que no quede, decía mi madre, que de filosofía casera sabía un rato. Sigo con el asunto petitorio. Eso, a los Magos de Oriente les ruego que en sus alforjas traigan caramelos, no solo a los niños, que todo se lo merecen, sino a los que pasamos de esa tierna edad, pues lleva razón el dicho de que a nadie le amarga un dulce. A los que se portan mal, no les debe faltar el carbón, pues una regañina o un fuerte tirón de orejas no les vendrían mal. A los que hacen la guerra, mil azotes en el culo y a la vista del ágora y del público. A los políticos del Congreso y del Senado, que solo saben insultar sin escatimar adjetivos denigrantes, le pediré a sus majestades que se traigan tiras de esparadrapo para cerrarles su boquita un buen tiempo, ya que con la boca tapada salen más guapos en la foto. Eso, cuando tiren caramelos, que tengan más cuidado, porque un caramelazo en un ojo te lo pone a la vinagreta y no ves ni cuatro montados en un burro. Por último, majestades: no vengáis más montados en los remolques de los tractores, pues no se ajusta a lo que nos contaron de niño; sé que no hay camellos por estos lares, pero como sois magos, podéis sacar la varita mágica para conseguirlo.

    Articulistas