Cantidad y calidad

La cantidad de dinero que se recibe por el trabajo está sujeta a diversos factores, tales como el nivel educativo, los idiomas, la experiencia y, cómo no, las condiciones materiales del lugar donde se desempeña. Aunque el dinero es sinónimo de oportunidades, no deberíamos valorarnos por lo que producimos sino por cómo somos. Irremediablemente solemos pensar en cuál es la cantidad necesaria o suficiente para poder vivir bien, para considerarnos parte de la afamada clase media. En un tiempo en el que se puede volar por poco dinero, renovar el armario a precio de coste o adquirir las tecnologías que corren a su obsolescencia; podemos tener la falsa sensación de ganar suficiente, ya que podemos satisfacer las necesidades que nos generan las corporaciones, pero, ¿qué es realmente un sueldo justo? Podríamos pensar que es aquel que nos permita ahorrar después de satisfacer las necesidades básicas o incluso podría ser aquel que nos diese la oportunidad de cambiar nuestras decisiones a corto o medio plazo. Un sueldo justo debe ser aquel que nos permita trabajar para vivir y nos ofrezca los medios para saber cómo podemos vivir mejor.