Buscando “cita previa”

    10 jun 2019 / 10:01 H.

    De un tiempo a esta parte se ha puesto de moda obligatoria tener que pedir una cita para tratar de resolver cualquier asunto importante o bagatela que se tenga entre manos: hacer la declaración de la renta, resolver cualquier trámite en las múltiples empresas de electricidad o gas, o en cualquier compañía de telefonía de las muchas que pululan por nuestro mercado, sin que —paradójicamente— ellas hayan concertado “cita previa” contigo ni te hayan dado un aviso; aunque algunas son capaces de asaetearte telefónicamente o por correo electrónico, a diestro y siniestro, para meterte por los ojos y oídos sus maravillosos productos, aunque sea la hora más intempestiva del mundo. Por eso me gustaría pedir “cita previa” para el cielo antes de morirme (no así para el infierno, del que comentan es demasiado cálido y bochornoso), para ver si me gusta y, en ese caso, quedarme definitivamente allí, cuando lo crea conveniente el sumo hacedor. Solamente tengo un problema: no tengo dirección ni teléfono, tampoco correo electrónico o web de ese paradisíaco lugar a través del que poder contactar. Por eso pido a quien los tenga o conozca que sea tan amable de facilitármelos. ¡Le estaré sumamente agradecido!