Buena nota

16 ago 2019 / 08:38 H.

No es que exista motivo para tirar los sombreros y las chaquetas al aire. Si hablamos del calor, sí, pero si hablamos de fútbol y más concretamente del Real Jaén, hay que mostrarse contentos pero comedidos. En la noche del pasado miércoles la plantilla blanca tuvo que hacer su primer examen ante la propia afición y hay que decir que obtuvo una buena nota, una respuesta que agradó a la no muy numerosa concurrencia que se dio cita en el Estadio de la Victoria. Ya se sabe, las vacaciones, el calor, el no ser de los primeros... y esas excusas de siempre porque, en esta ocasión, el precio de las localidades fue de lo más asequible. Lo importante es que quienes sí acudieron salieron satisfechos de lo que pudieron ver en el nuevo plantel. Una actuación en la que lo positivo estuvo por encima de lo que todavía precisa de mayor ajuste. Ni campanas al vuelo ni rasgadura de vestiduras. El nuevo equipo se mostró merecedor de confianza. Su trabajo frente a un rival de superior categoría, al que doblegó notoriamente, merece un aplauso, un reconocimiento, un aprobado, pero que no sirva para que surja un exceso de confianza. Hay que seguir trabajando con humildad y entrega teniendo casi la seguridad de que se está yendo por el buen camino hacia la hora de la verdad, una hora que dura muchas jornadas que habrá que ir viviendo una por una. Lo más importante es que la plantilla que dirige Alberto González no se parezca en nada a la anterior en dos aspectos fundamentales: la falta de condición física y la intensidad a la hora de encarar cada partido. La abultada victoria sobre el Villarrobledo no debe tener más lectura que la justa. Buena impresión general y detalles destacados en la mayoría de los nuevos jugadores. Agradó el trabajo de Vela, Juanjo, Martín, Javielillo, Lobato, aunque ninguno desentonó. Los ya conocidos se mostraron a buen tono, alguno incluso con menos kilos de los que arrastró la pasada campaña. Sí hay que hacer mención de la entrega y el buen trabajo de Juanca que, pese a ser el más castigado por los adversarios, se mostró con unos enormes deseos de ser útil al Real Jaén, en el que también los canteranos van tener sus opciones. Todo parece marchar correctamente y, tal vez, lo que se esté dejando notar, es la falta de decisión de muchos aficionados que todavía se andan pensando qué hacer. Al carro es ahora cuando hay que empujarle.