Buen uso de la IA
Se puede definir la inteligencia artificial como la combinación de algoritmos planteados con el propósito de crear máquinas que presenten las mismas capacidades que el ser humano. Las prestaciones que se pueden derivar de ella, son muchas y variadas: robótica, aplicaciones para teléfonos inteligentes, tráfico, etc. La utilidad de la misma puede ser muy importante. Lo malo es que la inteligencia artificial está diseñada por el ser humano, como en su día diseñó otros avances que el mismo ser humano se encargó posteriormente de darle un mal uso. Queda mucho por avanzar al respecto, pero tampoco podemos pensar que en un futuro pueda el propio ser humano ser sustituido, con sus valores, sentimientos, virtudes y defectos, por aplicaciones frías y calculadoras. Existen profesiones que exigen un trato directo con otras personas, como en la docencia o en la rama sanitaria, en las que habría que tener mucha cautela, ya que jamás el maestro o el médico, pueden ser suplantados por una máquina que haga parte de su trabajo. Abiertos a los avances tecnológicos, si, pero con cautela.