Ay, que el equipo ‘normalito’ ganó

Nuevo alcalde en Jaén, socialista como Emilio Arroyo y como José María de la Torre en los años 80 y 90 y no tan lejano, como Carmen Peñalver en el nuevo milenio. Julio Millán Muñoz ha sido elegido, contra todo pronóstico, alcalde, especialmente porque el Partido Popular se lo dio todo a Ciudadanos con tal de seguir con la vara de mando y tanto le dio que quien no fortalece su posición negociadora, al final, el contrincante pide más y más y mucho más, hasta la misma Luna (que en este caso era la marcha de Márquez “El Breve”). Por contrastar que el PSOE sí quisiera la capital, un órdago del analista que revive cada año de elecciones municipales, lo que sí quedó patente desde su proclamación es que Julio Millán sí que quería ser alcalde de su ciudad y contra todo obstáculo, fue quien ganó las elecciones, no se nos olvide pese al pacto.

Julio Millán estrena hoy cargo en el campo de “La Victoria” alentando al Real Jaén para que siga su camino de ascenso y, ahora, como alcalde, cuando aplauda a los jugadores, podría reconfortarse él mismo: Fue el único que creyó en que esto era posible. En un primer momento, porque el desgastado y apático equipo municipal saliente escondía voces que amenazaban tempestades; sí, en un vaso de agua, pero tempestades al fin y al cabo en un campo tan sensible para un partido como el orgánico. Luego, con la elección de un equipo entusiasta y capaz, ‘normalito’ (decían, como demérito, no como virtud) muy a su forma de ser, ciertos clanes y familias socialistas se apresuraron en proclamar a voz en grito y por todas las esquinas que jamás votarían “a Julito” siendo del PSOE de toda la vida; es más, hasta le decían al alcalde que el voto iba a ser suyo (y Cuqui se lo creía). El ambiente interno se fue serenando pese a los cacatúas solitarios y llegó la hora de la verdad: Casa a casa, barrio a barrio, impregnó de su ilusión a la mayoría silenciosa que no escribe en los medios ni lanza gritos en las ondas ni entiende de frentismo, solo quiere que su ciudad prospere y creyó que con él había una oportunidad. De 7 concejales que le daban las encuestas iniciarias, se montó en 11, con el 12 hasta el 90% del escrutinio.