Árboles sin sombra
Construidos en el siglo XI a escasos metros de sus hermanos mayores los Baños Árabes del Niño, bajo el Palacio de Villardompardo, se encuentran los Baños del Naranjo que pudieron tener cerca de 300 metros cuadrados, funcionando hasta que en 1246, los reinos castellanos conquistaron la ciudad de Jaén. Posteriormente éstos pasaron por ser una tahona —tienda donde se elaboraba pan—, una pescadería de la ciudad, después las conocidas carnicerías municipales, y finalmente antes de su reforma y apertura al público, ya en el siglo XX un colegio, la escuela municipal Grupo escolar Los Caños. Y quiero dar este dato histórico porque su bellísimo entorno, en la Plaza de Los Caños, se ha visto en estos días perturbado, ya que algún “carguillo” ha decidido podar los bellos naranjos que adornaban y daban sombra en dicha plaza. Como amante reconocida de mi barrio puedo indignada decir que Los Baños del Naranjo ya no están arropados por ellos, que una cosa es sanear por primavera y otra muy distinta mutilar unos árboles que eran ya característica propia de la plaza. Mejor que los turistas traigan consigo un parasol si deciden visitar y disfrutar de este maravilloso entorno. Y yo muy enojada seguiré luchando por mi barrio.