Antivirales covid

La sexta ola de la pandemia ha sido fulminante, aunque la gran mayoría de los casos cursan con muy pocos síntomas, y esta levedad hay que relacionarla con la menor agresividad de la variante Ómicron, pero también con la gran extensión de la vacunación. Sin embargo, la cifra de fallecimientos es impresionante y es que, en personas no vacunadas, en mayores y en enfermos con ciertas patologías, el potencial agresivo del virus es enorme. En España se han registrado 6026 fallecimientos en febrero. Además de las vacunas, la investigación farmacológica, ha abierto otra vía de esperanza: los nuevos tratamientos antivirales, que tiene demostrada su eficacia evitando el 88% de las muertes, lo que quiere decir que, de haber dispuesto de ellos, en la cantidad necesaria, en vez de 6026 fallecidos habrían sido 723, y nos hubiésemos ahorrado 5300 defunciones. Estos tratamientos para ser eficaces deben tomarse en los primeros cinco días, desde el inicio de los síntomas, antes de que aparezcan los signos de gravedad, con lo que, en puridad, la cantidad necesaria del producto sería superior a la capacidad de fabricación, pero si se restringe a solo a los grupos de riesgo, se necesitarían cantidades de producto asumibles. Tristemente lo cierto, es que, a diferencia de lo que ocurre en otros países de Europa, estos fármacos no están disponibles en España, sin que nadie haya explicado por qué.