Antiguo peregrinaje
Dicen las crónicas que tal día como mañana, festividad de la Asunción, miles de peregrinos llegaban a la ciudad del Santo Reino para venerar el Santo Rostro, y que este era mostrado por los balcones del templo catedralicio. Luego vino lo que imagino que vino; que si las malas comunicaciones hicieron que los peregrinos se lo pensaran, que si el calor, que si entre que voy y vuelvo a Jaén, puedo coger un AVE desde Madrid y llegar a cualquier sitio... Total, que la cosa se fue olvidando y por si no era suficiente con esto, llegaron los gallegos y vendieron su Camino a Santiago mejor que nosotros. Hay que reconocer que para vender, no somos unos linces. Y así comenzó nuestro declive del que aún no hemos salido ni creo que salgamos, teniendo la actitud que tenemos y uniendo esta apatía a los políticos que nos representan. Mañana, unas cuantas decenas de jiennenses que pasen por casualidad por la Plaza de Santa María, verán como la reliquia será mostrada por los cuatro costados de la Catedral, mientras con ojos atónitos, la cara de Dios pensará qué mal habrán hecho los jiennenses para que lo que antaño fue un acto multitudinario, se haya convertido en el siglo XXI en algo simbólico.