Ángeles que acompañan

Hoy hablaré de la España real, sobre la sanidad que nos acoge cuando enfermamos sin querer. La sanidad española ha dejado claro y conciso, de manera ecuménica en este país, que es un sistema inmaduro, que genera controversia y problemas por ciertos “profesionales” que acumulan fracasos en sus diagnósticos sin cesar, errando hasta la situación de no sanar al enfermo, comúnmente. Salud es igual a tesoro. ¿Y qué decir de los acompañantes? Los acompañantes son ángeles que cuidan de los enfermos en los hospitales. Personas que dejan sus rutinas, tanto de alimento como de descanso, higiene y demás hábitos, por estar cuidando de una persona enferma. Eso sí, todo ello en el pequeño espacio que está destinado a ellos junto a la cama del paciente. Estos pasan las horas del día y de la noche supeditados a la rigidez, estrechez e incomodidad de un sillón que levemente se articula. Los políticos se quejan de los altos presupuestos destinados a la “Sanidad Pública”, pero los pacientes y acompañantes lo negamos rotundamente, ¡y con razón! Acompañantes, los que deben tener reconocimiento y “un día de celebración”, semejante al Día de la Paz, como poco. Los ángeles que acompañan a los enfermos merecen mucho más.