Agua de borrajas

Los centros docentes educativos públicos llevamos sufriendo una semana ausencias y bajas del profesorado que no han sido cubiertas por la Consejería. Se supone que hoy, lunes 17 de enero, se empezarán a cubrir algunas de esas bajas que han desequilibrado el inicio del trimestre. Esta situación podría haberse evitado si el llamamiento al personal interino se hubiera adelantado al 3 de enero y, por tanto, el primer día de vuelta al cole las plantillas docentes hubieran estado funcionando al completo. Además las ratios de las clases siguen sin tocarse. Aulas que durante toda la pandemia no han disminuido, de manera generalizada, su capacidad de albergar alumnado. Los docentes luchamos y tenemos gran voluntad por hacer de la escuela un entorno seguro, pero seguimos sin tener acceso a dotación de la Consejería de mascarillas FFP2. Por otro lado, tampoco tenemos acceso en los colegios a test de antígenos para evitar la propagación del virus.Si bien es cierto que los medidores de CO2 y los filtros HEPA no son la panacea ayudarían mucho en las aulas a reducir riesgos. Es obvio que soluciones hay, pero sin voluntad política y sin una apuesta clara por proteger nuestra educación pública todo se quedará en agua de borrajas.