Actuar a tiempo

En efecto, es necesario actuar para garantizar a las generaciones del futuro el derecho a vivir en un medioambiente adecuado y sano. Debemos expresar nuestra oposición contra quienes contaminan sin control los mares de la tierra. Ha llegado la hora de manifestarse en las calles en favor de un planeta invadido por el plástico y en peligro de extinción. Decir basta ya a la pasividad inaceptable de unas administraciones que miran para otro lado ante la expoliación de nuestros recursos naturales; dejar de apoyar con nuestros votos a los que con su complicidad niegan la existencia misma del daño irreparable a la naturaleza. Asociarnos para hacer frente a las grandes corporaciones que eluden su responsabilidad ante tantas aves que asesinan sus tendidos eléctricos. Reconocer en serio los derechos de los animales, incluidos lo de aquellos que nos servirán de alimento. Dejar de consumir aquellos productos que no cumplan con una producción sostenible. Fiscalizar en positivo a los que cultiven los campos sin la química que lo mata todo. Y ante todo, enseñar en las escuelas el código de buena conducta con la que construir una cultura respetuosa con el entorno que las ha tocado vivir.