25.920 (3)

Como decíamos ayer, a buen observador, pocas miradas bastan. De aquesta simple manera, quienes vieron el principio, vieron, por fin, el fin. Y así fue que descubrí, que las matemáticas nos proporcionan instrumentos para adivinar el futuro con solo conocer la tendencia. Además de saber cuánto tiempo tardaría en llegar a su previsto destino en el mapa oscuro de las noches. Le llamaron Zodíaco y calcularon que el paso por cada constelación duraría 2.160 años, que es lo que tarda todavía. El paso de las doce constelaciones, o dicho de otra forma, la duración completa del ciclo zodiacal, sería de 2.160 por 12, lo que nos lleva, de nuevo a la misma solución de ayer: 25.920 años. Lo que hoy se conoce como el ciclo total de la precesión de los equinoccios, ayer era el Zodíaco y servía para predecir el futuro de las personas. Todavía hoy no hay periódico que no nos lo recuerde en su última página bajo el título de Horóscopo. Ahí nos indican en qué posición se encuentran las estrellas con respecto a cada uno de nosotros, y se nos avisa que seremos los mismos y estaremos en el mismo sitio cuando dentro de 25.920 años esas estrellas vuelvan a estar en el mismo lugar de la bóveda celestial. No seré yo el que lo crea, pero no está de más saber que los antiguos sí lo creían y que los números no han cambiado salvo que los científicos modifiquen la longitud del metro. Pero esto queda para la próxima.