Pozo Alcón, a la espera de que Salud declare el agua apta para el consumo tras 19 días de prohibición
A través de un bando, el alcalde, Ivan Raúl Cruz, ha apuntado que el Ayuntamiento ha procedido al vaciado y limpieza extraordinario de los depósitos
Pozo Alcón se encuentra a la espera de que la Delegación de Salud declare el agua apta para el consumo tras 19 días de prohibición, mientras que desde el Ayuntamiento ya se han adoptado toda una serie de medidas con el fin de que el agua de la red cumpla con los parámetros de turbidez exigidas por la autoridad sanitaria. Desde el Consistorio se sigue facilitando el agua potable a través de camiones cisterna.
A través de un bando, el alcalde, Ivan Raúl Cruz, ha apuntado que el Ayuntamiento ha procedido al vaciado y limpieza extraordinario de los depósitos de forma adicional a los que se hace habitualmente en el mantenimiento y control del abastecimiento. Asimismo, se ha realizado un purgado de la red de distribución municipal.
Desde la Delegación de Salud se ha pedido al Ayuntamiento un plan de mejora de la filtración del agua y se ha acordado realizar una auditoria técnica por parte de la empresa fabricante de laestación de filtrado, que data de 2003 y estaba diseñada para los parámetros que estaban en vigor anterior a la nueva normativa de 2018.
En cuanto a la turbidez de los depósitos, que es el lugar donde se recepciona el agua de la captación, estos niveles están entre 2 y 3 puntos, por tanto ligeramente por encima del valor exigido por la actual normativa, que es 1.
Además, desde el Consistorio se están haciendo gestiones para la realización de "un estudio técnico ambicioso, a corto y medio plazo para inversiones de mejora en el abastecimiento, así como las gestiones necesarias para obtener financiación".
El alcalde incide en su bando que el origen de la turbidez en el agua es a consecuencia del "aumento brusco del caudal utilizado por los regantes, ya que "compartimos la captación con los regantes en el canal principal" del embalse de La Bolera y esto ha provocado que "entren sedimentos en nuestros depósitos, produciendo con ello, la saturación de la estación de filtrado de la red municipal".
Fue el pasado 1 de octubre cuando la Delegación de Salud declaró el agua no apta para el consumo en Pozo Alcón por la turbidez que presentaba y a la espera de los análisis cumplan con los parámetros exigidos.
Desde entonces, el Ayuntamiento está realizando los análisis en días alternativos que exige la autoridad sanitaria y que son tres a la semana, además de los de trihalometanos y plaguicidas. Respecto a estos dos últimos, el bando señala que los resultados son "totalmente correctos" por lo que quedaría por solventar de manera definitiva los parámetros referidos a la turbidez.