Los problemas en Aeroepoxy no se solucionan al completo

La situación de la empresa Aeroepoxy sigue siendo, cuanto menos, delicada, desde el pasado mes de octubre, cuando el Juzgado autorizó la venta de la empresa a Innovative Industries Internacional 21 S. L., con sede en Sevilla. El importe se fijó en 300.000 euros, además de hacerse cargo la empresa del “leasing inmobiliario” de la nave en la que está instalada la fábrica, con un valor de 1,7 millones de euros.

La venta tuvo que sacrificar a 19 trabajadores de la plantilla, que tenía inicialmente 54 y se quedó con 35. El conflicto comenzó en 2017, cuando la empresa Aeroepoxy puso en marcha un ERTE (Expediente Regulador de Empleo) dando paso a problemas salariales para los trabajadores. La plantilla quiso luchar por sus puestos de trabajo hasta el final, hasta que se hizo efectiva la venta tras el concurso de acreedores correspondiente. A pesar de esta pérdida de empleados, el resto se mostró esperanzado en que por fin llegara la carga de trabajo, tan necesaria para que la empresa siguiera con su actividad.

Pasados unos meses de la adquisición de esta nueva empresa, al parecer persiste la misma situación. Las últimas noticias apuntan que habrá 10 despidos más entre los trabajadores, lo que reduciría la plantilla a 25 empleados. Un nuevo revés para una empresa que parece no levantar cabeza, a pesar de todos los intentos. Comisiones Obreras (CC OO) estuvo realizando un seguimiento de Aeroepoxy desde sus inicios. El sindicato luchó para que el cierre no se produzca y mantuvo reuniones con diferentes empresas e instituciones. Según el coordinador provincial del sindicato, Francisco Cantero, actualmente “seguimos luchando por y para esta empresa, aunque no se demuestre en el exterior”. Cantero no confirma que haya nuevos despidos, ya que la empresa aún no ha comunicado nada al respecto.

“Lo que sí me consta es que los trabajadores están acudiendo a trabajar con normalidad y recibiendo sus nóminas. Desde CC OO quisimos que se mantuviese abierta y así permanece hasta ahora. No queremos hacer degradaciones sobre ese tema, ya que no hay nada oficial al respecto. Decir algo que no sea oficial solo puede perjudicar a los trabajadores, por lo que no hay que adelantarse a los acontecimientos”, afirmó Cantero. Se espera entonces que la empresa pueda seguir adelante con su actividad sin prescindir de ningún trabajador más. Para ello, es necesario que llegue a la misma carga de trabajo para que los empleados puedan realizar sus funciones de siempre. La lucha continúa, a la espera de conseguir una rutina normal en Aeroepoxy.