La vendimia francesa generará unos nueve millones de ingresos

La recolección de uva atrae a unos tres mil quinientos jornaleros jiennenses

27 ago 2017 / 11:04 H.

Unos 3.500. Este es el número de jiennenses que sale, cada verano, en busca de los ingresos que reporta la vendimia en Francia. La cifra se encuentra estabilizada desde hace unos años, como confirma Antonio Marcos, vicesecretario general de la Federación de Industria, Construcción y Agro de la UGT. Se trata del mayor contingente de los alrededore de once mil emigrantes procedentes de toda Andalucía. El sindicato informa a los temporeros, a su paso por Bailén, con motivo del comienzo de la campaña.

Las previsiones son que Jaén consiga alrededor de nueve millones de ingresos, ya que la remuneración media por trabajador está entre dos mil quinientos y tres mil euros. La duración de la campaña oscila entre veinte días y un mes. Marcos subraya el aliciente que supone un marco de treinta y cinco horas semanales, en el que la demasía se abona como extra. Los municipios que más brazos aportan a la recolección son Huesa, Valdepeñas, Marmolejo, Castillo y varios pueblos de la zona de Sierra Mágina.

Antonio Marcos sostiene que, este año, la oferta de personas interesadas en desplazarse a Francia resulta muy superior a la oferta de las empresas de ese país. En general, explica los vendimiadores mantienen el puesto de un año para otro y las bajas se cubren con gente del entorno de los demás obreros. Por otro lado, el sindicalista remarca el auge del grupo integrado por estudiantes que buscan dinero para costear sus carreras universitarias.

Desde la UGT, en verano se impartieron charlas informativas en Huesa y Valdepeñas, en las que ofrecieron consejos. La organización considera fundamental que los asalariados no se vaya “a la aventura”. Por ello, el consejo básico es partir con contrato en origen para evitar sorpresas. Por otro lado, el sindicato advierte contra la proliferación de empresas de trabajo temporal, porque existe la posibilidad de no generar derechos socialaborales en Francia, con los consiguientes perjuicios para el empleado. Las centrales efectuarán visitas, a lo largo de la temporada, para comprobar sobre el terreno que las condiciones pactadas en el contrato son las mismas que se aplican en la práctica.

Entre los alicientes para los emigrantes sobresalen las ayudas familiares para quienes tienen hijos menores a su cargo, con cantidades que rondan los ciento treinta euros al mes para quienes tiene dos vástagos y cerca de cuatrocientos para los padres de tres. El sistema de trabajo ha mejorado en los últimos años, con una creciente mecanización de las explotaciones, salvo en las zonas con mayores pendientes. Los jornaleros aprovechan los ingresos en una época del año en la que la agricultura jiennense no requiere apenas trabajadores. Las mala previsión de cosecha olivarera, asimismo, incrementa el interés por ir a Francia.

“La buena experiencia de 2016 me animó a volver”
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El joven Jorge Manuel Ávila Rodríguez es vecino de Caparacena, una aldea granadina próxima al pantano de Cubillas. A sus veinticuatro años se dispone a empezar su segunda campaña en la vendimia francesa.

“La experiencia de 2016 me animó”, explica. En este sentido, precisa que hace unos mesas también trabajó en la explotación vitivinícola, en tareas de mantenimiento del cultivo. El principal aliciente para emigrar es el económico, pues valora la remuneración de diez euros por hora. “En Andalucía no hay casi trabajo. Solo tenemos la aceituna y este año ni eso”, admite.

La cuadrilla a la que pertenece se dirige a la zona de Aviñón. Después de haber llegado a la vendimia a través de una amiga, la confianza lograda es tal que el jefe le pidió que buscara a nueve personas. “Nos portamos bien y eso es importante”, apunta Ávila, quien espera acudir a Francia si siguen las condiciones laborales actuales.

“Soy la única mujer que va dentro de este grupo”
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Jessica Martín López es una mujer de Santa Fe (Granada). Detalla que lleva trece años como recolectora de uva en tierras francesas, con una pausa para ser madre. De acuerdo con sus expectativas, en alrededor de un mes, con en torno a veinte días de trabajo efectivo, conseguirá una remuneración por encima de mil quinientos euros, una opción que no está disponible en tierras andaluzas.

“Esta vez soy la única mujer que va dentro de este grupo”, indica. En concreto forma parte de un equipo de nueve personas, procedentes principalmente del municipio granadino de Pinos Puente. Sin embargo, valora el trato igualitario que reciben los dos sexos en las campañas más allá de los Pirineos, mientras que en Andalucía la mujer, a diferencia de lo que ocurría hasta hace solo unos años, apenas tiene posibilidades de un jornal. El lugar de destino es el pueblo del Châteauneuf-du-Pape, cerca de Aviñón.