La fiesta vinícola de Frailes vuelve a ser multitudinaria
La edición número 24 culmina con un inmejorable ambiente

Un éxito. Con estas palabras valoró la alcaldesa, Encarnación Castro, la vigésimo cuarta edición de la Jornada Vinícola y Gastronómica de Frailes, conocida popularmente como Fiesta del Vino. La celebración, que empezó el viernes, regresó el viernes, después de no celebrarse, como consecuencia de la pandemia, desde 2019. El momento culminante estuvo, como de costumbre, en el almuerzo servido en el recinto ferial de las Eras del Mecedero. Un equipo, dirigido por Luis Montes, elaboró un menú compuesto por la tradicional olla podrida, remojón y embutidos locales.
La principal novedad radicó en la limitación del aforo a mil comensales. El precio de la entrada era de cinco euros para los fraileros y ocho para los forasteros. En paralelo, se reorganizó la atención, de manera que en otra zona había una barra para quienes no pudieran conseguir los tiques, que se agotaron, o para las personas que no desearan comer. De esta forma no quedó nadie desatendido. Allí se sirvieron bajo la carpa vino y otras bebidas. Según datos municipales, se consumieron trescientos litros de caldos a granel y un palé compuesto por botellas con vinos de la variedad tinta syrah.
La concejal de Turismo, Deportes y Servicios Municipales, Mercedes López, subrayó el buen ambiente en el pueblo desde por la mañana. Se empezó con las visitas guiadas por el casco urbano. Se visitaron inmuebles y rincones emblemáticos, como la iglesia de Santa Lucía, la Plaza de Miguel de Cervantes, el Nacimiento y la Cueva de Pilar. Se aprovechó para mostrar a los visitantes la ruta de cruces creada esta misma primavera. Por otro lado, pasado el mediodía, se abrió en el ferial la zona de productos artesanales, con la que se promoción, en particular, la industria agroalimentaria local que, aparte del vino, ofrece embutidos, quesos y otros manjares.
El broche a la programación lo puso la actuación de Memory Band, un conjunto especializado en versiones de célebres canciones de los años 80 y 90. Con el objetivo de potenciar el carácter familiar de la celebración en el recinto había un colchón hinchable que hizo las delicias de los más pequeños de la casa.
El formato de este año supuso, en la práctica, el retorno a la normalidad, aunque con adaptación a las circunstancias actuales. Como de costumbres, acudieron numerosas personas, no solo de Frailes y el resto de la Sierra Sur, sino de otros puntos de la provincia y de Andalucía.
La programación comenzó el viernes con el pregón, a cargo del cocinero Juan Aceituno, del restaurante jiennense Dama Juana, que cuenta con una estrella Michelin. Acudieron autoridades locales y de ámbito provincial y autónomico. En la Casa de la Cultura se presentó un vídeo promocional sobre el medio rural. Por la noche, hubo una degustación de caldos y de morcilla en el barrio de la Plaza de los Toros.