Guarromán, más que mascarillas

Trabajo, trabajo y trabajo. Ese es el espíritu que han adquirido una decena de mujeres en el municipio de Guarromán, donde desde el pasado lunes cosen mascarillas, pero también batas para sanitarios y uniformes para quienes lo necesitan, aunque últimamente están tejiendo material para las residencias de mayores.

La Asociación de Mujeres de este municipio de la comarca de Sierra Morena tiene un taller de corte y confección y alrededor de una decena de mujeres se ha puesto manos a la obra y a pleno rendimiento, desde la mañana hasta la noche, las manos de estas mujeres crean todo tipo de material sanitario ante la demanda que se está haciendo en los últimos días, en especial al colectivo de las residencias de ancianos, uno de los más afectados por esta crisis. “Cuando vi que la Junta ya iba a adquirir dos millones de mascarillas, les dije a las costureras que comenzaran a elaborar batas y uniformes para trabajadores en geriátricos”, asegura el alcalde de Guarromán, Alberto Rubio.

El regidor reconoce que, con la tela que tenemos, viene mejorar elaborar este material para dichos centros. “Los centros que nos han llamado hasta ahora no tienen ningún contagio y por eso quieren seguir así”, destaca Rubio. Precisamente, el alcalde se encarga de recoger las telas que necesitan las confeccionistas para elaborar el material sanitario: “Cada pregunto a quién le hace falta y cuando llego a sus casas siempre les digo ‘que viene el repartidor de Amazon’, y les saco también una sonrisa; ellas están muy ilusionadas y motivadas”.

Una de estas costureras es Carmen Avellaneda. Desde las 09:00 hasta las 22:00 horas, ella se encuentran en su habitación de la costura donde pasa las horas poniendo su granito de arena. “Por suerte, mi hija me ayuda en las tareas de la casa y así tengo yo más tiempo, de hecho el dedo lo voy a perder (entre risas)”, asegura Carmen. Además, ella y sus otras compañeras llevan solo ocho días cosiendo y la producción ya ha alcanzado grandes registros. Por ejemplo, hoy van a salir de allí unas 70 mascarillas, 20 batas y 50 unifores para los sanitarios. “Unas saben más u otras menos, pero estoy muy orgullosa de todas ellas porque están haciendo un gran trabajo en tiempos difíciles, además de que Alberto (el alcalde) trajo el coche cargado de rollos de tela y ya solo quedan 20 metros”, reconoce esta costurera quien apunta que, de momento, no han ampliado el número de costureras: “Alberto nos trae todo el material y no queremos que tampoco pase mucho tiempo en la calle”.

Este grupo es otra muestra más del espíritu solidario que ha desprendido de la provincia jiennense con una gran fortaleza.