En recuerdo de la historia de Huelma

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Pasear por las calles de Huelma durante el pasado fin de semana fue como viajar el tiempo, concretamente a la Edad Media. El singular municipio de Sierra Mágina rememoró la toma de Íñigo López de Mendoza de la ciudad, que hasta 1438 se conservó en manos de los musulmanes. Aquel castillo, que observó, imperante, las distintas actividades de Huelma Medieval, fue un testigo privilegiado de las escaramuzas entre moros y cristianos. Fue precisamente este episodio histórico uno de los platos fuertes de estos festejos, por lo que se decidió representarlo en la tarde del sábado a través de Asociación Moros y Cristianos Montejicar. Los vecinos pudieron viajar al pasado a través de múltiples actividades ambientadas en la época medieval, tales como exhibiciones de tiro con arco o puestos ambulantes con productos de distinta índole. “Las fiestas medievales dotan a Huelma de un toque muy especial porque rememora la reconquista del municipio”, asegura Manuel Quesada, vecino del municipio.

Uno de los espectáculos que más furor causó en los asistentes fue la exhibición de vuelo de cetrería, en la que los niños participaron de manera muy activa. Sin ir más lejos, el protagonismo de la mañana del domingo se lo llevó Maya, un águila de cola roja que sobrevoló las altitudes de Huelma posándose en los brazos de los más pequeños. Casi una decena de caballos se abrieron paso por las empedradas calles del municipio, mientras que los miles de participantes del mercadillo medieval los contemplaban ensimismados. De fondo, para una ambientación más realista, la música de la Edad Media ponía una banda sonora perfecta para la ocasión. Se trata de una iniciativa del Ayuntamiento de Huelma y Solera, que retoma los festejos con la máxima de poner en alza el valor que atesora su bello casco histórico, como explica a Diario JAÉN la concejal de Cultura, María del Carmen Fernández. “Nuestro objetivo es dar a conocer la belleza de los monumentos que conforman el patrimonio histórico, como la iglesia de la Inmaculada Concepción y el castillo de Huelma”, remarcó. A vecinos como Francisco Rubio, le parece una “iniciativa muy buena”, que vale la pena retomar.

Una forma de hacer que “el pueblo se llena de aire y de vida”, como señala Manuel López. “La verdad es que está siendo una buena experiencia, en gran parte a la gran organización de estas fiestas medievales”, admite Antonio Jesús Puertas. Para Rosa Pedrosa era su primera vez por allí y, aunque la lluvia hizo acto de presencia el día anterior, el domingo pudo presenciar con alegría la cantidad de gente que se acercó a disfrutar de las actividades.