El barco solar toca por fin el agua del pantano del Tranco

El vehículo llega al embalse después de un complicado camino por la comarca

20 dic 2015 / 11:27 H.

El barco turístico del pantano del Tranco de Beas, una iniciativa puesta en marcha por la Diputación, ya es una realidad tangible. El vehículo llegó, a mediodía, al embalse, después de un azaroso camino por la comarca de la Sierra de Segura. Por la noche, el primer contratiempo apareció a la entrada del núcleo de Cortijos Nuevos cuando las dimensiones de una calle se interpuso en el camino del convoy. Ante la dificultad, se decidió dar un rodeo. Sin embargo, por la mañana el contratiempo surgió ante la imposibilidad de atravesar un olivar. Después de pedir permiso al propietario, se retiraron las plantas que estorbaban y se creó un camino. Por último, en las cercanías del embarcadero, una glorieta dio quebraderos de cabeza a la comitiva. Finalmente la nave alcanzó su meta, en Hornos de Segura, alrededor de las dos, es decir, con una hora y media de retraso respecto a las previsiones.

Por la tarde comenzó la complicada operación de botadura, que se desarrolló sin problemas. Una grúa de grandes dimensiones colocó la embarcación sobre la superficie líquida, encima de la que quedó. Al ser la jornada electoral, pocos políticos se acercaron a la zona. Sin embargo, la expectación en la comarca resultó destacada, con todos los establecimientos del entorno repletos de público. En principio, la inauguración está prevista para el miércoles. Después habrá que culminar el proceso de concesión del servicio.

Las dimensiones del barco, fabricado en Mallorca, son espectaculares, con 4,25 metros de ancho, 4,20 de altura y 12 de eslora. El vehículo llegó por mar hasta Valencia, desde donde partió el complejo transporte especial por carretera.

Se trata del primer barco de motor que surca las aguas del Tranco de Beas, una zona protegida. La tecnología usada permitirá que navegue aunque esté nublado. Avanzará por el embalse despacio, con el objetivo de que los turistas puedan contemplar en todo su esplendor el paisaje de la sierra de Segura, que combina montañas abruptas y una vegetación exuberante.

Los 275.000 euros de la adjudicación del barco son sufragados por la Diputación y la Junta. El dispositivo tiene capacidad para albergar a más de sesenta personas.