Las mejores clases del año
Multitud de actividades en los colegios Francisco Estepa y Cristo Rey a lo largo de julio y agosto

Poco a poco, las vacaciones acaban y las Escuelas de Verano de Andújar cierran sus puertas en estos días. Los centros se llenan poco a poco de música, disfraces, bailes y el hasta luego de alumnos y profesores. Es el caso de la Fundación Don Bosco y la Escuela Municipal de Verano del colegio Público Francisco Estepa Llaurens. La primera se desarrolló en el “Cristo Rey”, con unos cincuenta alumnos durante los meses de julio y agosto. El último día de clase, los niños despidieron las clases con una fiesta , en la que se proyecto un audiovisual compuesta por muchos de los momentos vividos por los más pequeños de la casa. Con la puesta en marcha de esta iniciativa formativa, fue posible la programación de diferentes actividades lúdicas y de apoyo educativo a niños, con edades comprendidas entre los 3 y los 15 años.
Además, a los chicos se le inculcaron hábitos de vida saludables, como el ejercicio físico. También reforzaron costumbres tan importantes como la lectura, la música y la expresión artística. Además, gracias a una subvención de la Junta de Andalucía incluida en el Plan de Garantía Alimentaria, se garantizó a todos los asistentes a las tres comidas básicas. Este servicio, dependiente de la Concejalía de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Andújar, contó con monitores, como el educador Juan Antonio Huertas, María del Carmen López, Daniel Baltanás, María José Gavilán y Laura Galaso. De esta forma, el equipo de profesionales contó con voluntarios como Ángel Expósito y Rocío Merino, bajo la dirección de la directora Territorial en Jaén de la Fundación Proyecto “Don Bosco”, María del Carmen Cruz. Por otro lado, la Escuela Municipal de Verano de la Concejalía de Educación tuvo como escenario el colegio Francisco Estepa. En este caso, fueron más de ciento cincuenta los usuarios que pasaron por sus instalaciones durante el verano. Para el acto de clausura, se organizó una función teatral. En este tiempo, los alumnos participaron en talleres de entretenimiento, con manualidades para fomentar la creatividad. También se programaron talleres de expresión artística y psicomotricidad. Otras de las actividades fueron el proyecto denominado “Pequeños Científicos”. El objetivo de esta idea fue acercar el conocimiento a los alumnos, así como descubrir curiosidades y poner en práctica lo aprendido, a través del trabajo en el aula de verano. Durante estos meses, los niños pudieron disfrutar de una excursión un día a la semana.
Como ya ocurriera en la primera etapa del curso en julio, los niños visitaron una tienda de mascotas, conocieron en profundidad cuál es la función y el trabajo que desempeñan los bomberos y también recorrieron el Teatro Principal de Andújar, para poder conocer cuáles son las actividades y cómo se trabaja en estas dependencias municipales. Este servicio de escuela de verano también contó con un amplio equipo de profesionales de la educación, como fueron María Jesús Moreno, Verónica Ruiz, María Sánchez, Natalia Ruiz, Isabel Cadmio, y María José Parrado. Estas acciones estuvieron dirigidas por la coordinadora Rafaela Moreno, la directora de “Aula Integral de Formación”, María de los Ángeles Osorio, la empresa de Baeza, encargada de desarrollar esta iniciativa, y la coordinadora de centros, Carmen Gómez. Los padres destacaron las oportunidades que ofrecen este tipo de actividades, que ayudan a hacer más llevadero el verano.