Repatriación por el robo de género en un supermercado

Un joven marroquí de veintiséis años, identificado como Y. B., será repatriado próximamente. Fue arrestado el martes de madrugada después de que agentes de la Guardia Civil y la Policía Local lo cogieran “con las manos en la masa” mientras perpetraba un robo en el supermercado Lidl. Tenía una orden de expulsión del territorio español, por lo que, después de que fuera puesto a disposición del juzgado de guardia por parte de las Fuerzas de Seguridad, se decretó su ingreso inmediato en prisión.

Los miembros de la Benemérita y la Policía Local acudieron con rapidez después de recibir aviso de un particular que escuchó ruidos y por la activación de la alarma del establecimiento. Sin embargo, dos cómplices del detenido, también de origen norteafricano, consiguieron escapar sin ser arrestados, aprovechando la noche y la ubicación del negocio, que tiene una zona de campo por detrás. Los delincuentes habían accedido hasta el local después de forzar una puerta —situada en un lateral, junto al aparcamiento— al destrozar a golpes los cristales.

Los asaltantes tuvieron tiempo para circular por varias secciones del supermercado, aunque hicieron acopio de género, principalmente en la zona dedicada a los alimentos y las bebidas. El valor de los productos sustraídos en las instalaciones, ronda los mil euros, según los primeros cálculos, a lo que hay que sumar los desperfectos ocasionados en las instalaciones. El caso se encuentra en proceso de investigación, ya que se trata de averiguar el paradero de los otros cómplices. Para ello será fundamental el visionado de las grabaciones de vídeo, la inspección ocular —para determinar si existen huellas dactilares— y la presencia de posibles testigos. La puerta rota quedó protegida por un precinto de la Guardia Civil.

TRANQUILIDAD. A pesar de la presencia de decenas de inmigrantes en situación irregular, los problemas de convivencia durante la presente campaña de recolección de la aceituna son puntuales. Se cuentan algunos altercados, como las peleas ocurridas en la estación de autobuses y su entorno, en ocasiones con algunos daños materiales. Por otro lado, desde hace semana hay personas que pernoctan en la calle. Se cobijan, principalmente, en los andenes de la estación y en otros lugares más resguardados del frío, como los cajeros de bancos, portales y pasajes.