“Pellizco” al poder del edil de Ciudadanos de Alcalá la Real Ángel Montoro

No hay semana sin “turbulencias” en el Gobierno municipal de coalición que forman el Partido Popular y Ciudadanos. El Boletín Oficial de la Provincia publicó ayer un decreto del alcalde, Marino Aguilera, del PP, en que retiraba parte de sus competencias a su socio “naranja”. La resolución, con fecha 28 de noviembre, quitó la capacidad delegada en él hace poco más de dos años —cuando hubo una redistribución de funciones en el equipo municipal— “para conocer y resolver de los procedimientos de fraccionamiento y aplazamientos que soliciten los interesados en relación a los tributos e ingresos de derecho público que soliciten”. Esta potestad pasa, tras la decisión, al propio Marino Aguilera.

El detonante viene explicitado en el propio decreto. Según el texto, Ángel Montoro dictó cinco resoluciones en las que denegaba los fraccionamientos solicitados por hosteleros respecto a las autoliquidaciones giradas por la tasa por la ocupación de vía pública con mesas y sillas para la próxima temporada anual de 2023, con base a los informes emitidos por la Tesorería municipal de este Ayuntamiento, “en contradicción con la Ordenanza General de Gestión, Recaudación e Inspección de los Tributos Locales de este Ayuntamiento”. Todos estos dictámenes han quedado revocados.

Por el momento, a pesar del “pellizco” a sus competencias como primer teniente de alcalde, no se conoce reacción, al menos en público, de Montoro —titular de Hacienda, Contratación y Aldeas y portavoz del Gobierno—. Con su compañera de partido, Paloma Moyano, aupó al poder al PP en virtud de un pacto de gobierno vigente desde el mes de junio de 2019.

oposición. El concejal del PSOE Francisco Javier Frías, también pedáneo de La Rábita, manifestó, en el turno de ruegos y preguntas del último pleno, que estaba sorprendido después de que un operario le comunicara que, a partir de ahora y hasta nueva orden, lo que se hiciese en los núcleos rurales debería tener la orden expresa de la coordinadora de Obras [María Isabel Aguilera] y que la palabra del coordinador [Francisco Javier Pérez] y el concejal de Aldeas [Ángel Montoro] “no servía para nada”. Frías preguntó al edil “naranja” si tenía constancia de esta decisión y pidió explicaciones sobre a qué se debía esto. Argumentó que, con más intermediarios, las obras se ralentizarán y criticó el trato a los pedáneos.

Montoro dijo no tener constancia y pidió el nombre del empleado o saber de dónde venía la supuesta orden. Tildó de “poco elegante” el hecho de “tirar la piedra y esconder la mano”. Por su parte, la concejal de Obras y Servicios, la popular Mercedes Flores, se interesó también por la identidad de la persona que había hablado con Frías y aseveró no tener problemas con el coordinador de Aldeas.