La estrategia de Nazzaryn pasa por el homicidio imprudente

Indignación de Hakima, la madre de la asesinada Khawla, al plantear la defensa del presunto autor que se le juzgue con esta tipificación mientras la acusación y la Fiscalía plantean asesinato y agresión sexual

01 dic 2022 / 11:47 H.
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La instrucción del crimen ocurrido en la iglesia de Santo Domingo de Silos el pasado mes de febrero avanza. En esta línea, se ha celebrado en el juzgado alcalaíno una comparecencia con las partes. El autor confeso de la muerte, Nazzaryn N. N., compareció por vía telemática desde la prisión de Albolote (Granada), donde lleva meses en prisión preventiva.

Ante la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 tanto la acusación particular, que representa a Hakima, madre de la víctima, Khawla —que era conocida en la ciudad como Jaula—, como la Fiscalía instaron a que se investigue a Nazzaryn N. N. por un delito de asesinato y otro de agresión sexual. Por su parte, la defensa del recluso, un abogado de oficio, defendió la existencia de homicidio imprudente, pero en cuanto a la agresión sexual la consideró atípica para la conducta. El letrado que representa a Hakima, entre una batería de cuestiones técnicas, reclamó que haya una nueva declaración de los testigos, es decir, las personas que estuvieron y se comunicaron esa tarde junto con el implicado en los graves hechos.

La Fiscalía, además, pidió que se indague en la etiología de las lesiones de la víctima y del autor de la muerte violenta recogidas en el informe forense. Mientras, la defensa se pronunció en la línea de propugnar que se analice la naturaleza de las heridas que tenía el cadáver. No obstante, además, solicitó que se tome declaración al investigado. Por tanto, según ese movimiento, Nazzaryn N. N., ahora, tiene el deseo de hablar. Hasta el momento, no ha colaborado en el esclarecimiento de los hechos, de manera que prácticamente desde el principio se acogió a su derecho a no declarar.

Esa estrategia causa indignación a la madre de la adolescente de catorce años, que ve una clara intención del autor confeso de rebajar la condena, de manera que se dé a entender que fue una especie de juego que se le fue de las manos. Una vez que se han pronunciado las partes, la última palabra la tiene la jueza instructora que deberá determinar si atiende los requerimientos efectuados. La investigación todavía tiene mucho camino por delante, pues se espera la presentación de pruebas periciales que pueden arrojar luz.

Hakima está destrozada desde que perdió a su hija, de catorce años, el pasado 14 de febrero. La madre pretende que todo el peso de la ley caiga sobre el autor confeso, de manera que sea castigado con prisión permanente revisable, la pena máxima recogida en el ordenamiento legal español, dada la gravedad de los hechos. Por eso, está dispuesta a llegar hasta donde haga falta para demostrar que fue un crimen premeditado, igual que la agresión sexual que se investiga desde febrero.

Una de las claves para la madre es que la progenitora está convencida de que Nazzaryn N. N. no obró solo, sino que tuvo cooperadores que también tendrían que responder por su implicación. Por ese motivo, defiende que se investigue de manera minuciosa a personas del entorno del encausado por su participación o colaboración en la perpetración del crimen.

Desde el principio, ha hablado de una “trampa” tendida a su hija, que salió de su domicilio por la tarde para estudiar en casa de una amiga y terminó muerta en la iglesia de Santo Domingo de Silos, presuntamente, a manos de un individuo al que conocía, pero con el que no tenía relación.

Alcalá