Denuncia por un ataque de perros a dos senderistas

Tanto fue el cántaro a la fuente que terminó por romperse. Después de varios meses en los que proliferaron las quejas por la situación de peligro, dos mujeres denuncian ante la Guardia Civil que fueron atacadas por un par de perros pastores en la finca de La Acamuña. Los hechos ocurrieron el domingo por la mañana. Una de las víctimas, que desea permanecer en el anonimato, explica que caminaban por el camino asfaltado cuando, de repente, se les acercaron un par de perros de tipo mastín con una actitud “muy agresiva”. La afectada indica que los canes las acorralaron y que ni siquiera las dejaban retroceder. Al abalanzarse sobre ambas, precisa la mujer, les causaron en las piernas múltiples contusiones y algunos mordiscos. La afectada relata que fue una situación angustiosa pues el ataque duró alrededor de un cuarto de hora, hasta que consiguieron zafarse de los corpulentos especímenes. Después, las senderistas recibieron asistencia en el servicio de Urgencias, donde se emitió el parte de lesiones adjuntado a la denuncia. Están sometidas a un tratamiento para prevenir la rabia o cualquier otro problema derivado de las mordeduras. La perjudicada asegura que aunque la explotación de monte es privada el camino, bastante transitado, es público. Hasta ahora, dice, nunca habían sido atacadas por los perros, aunque reconoce que otras veces se acercaron ladrando.

La visión del ganadero que tiene arrendada la finca es totalmente diferente. Defiende que las mujeres rebasaron la puerta que de entrada al recinto, que, según él, es totalmente privado con el acceso prohibido, pese a que por ahí suben el personal de mantenimiento de las antenas situadas en la cumbre. “¿A qué han ido ahí?”, se pregunta sobre la presencia de las senderistas, cuya entrada está dispuesto a denuncia. Resalta que en el portón de acceso hay señalización que avisa de la presencia de los perros.

Por el camino en cuestión discurren, prácticamente a diario, personas que salen a hacer actividad física. Unas corren mientras que otras hacen senderismo o se mueven en bicicleta. El tramo, que comienza en la zona de Puertollano es visitado dentro de una ruta que termina en el puerto del Castillo. Con una fuerte pendiente, el lugar, también conocido como Cerro del Agua, es de gran belleza. Aúna las vistas espectaculares con la presencia de vegetación mediterránea, muy bien conservada en algunos puntos.

En definitiva, las dos víctimas que fueron atacadas por los perros tuvieron contusiones y mordiscos leves en las piernas, según el parte médico después de acudir a Urgencias tras estar acorraladas por los canes. Según el testimonio de las senderistas, solo mordió uno de los perros, mientras que el otro no dejaba de ladrar en unos momentos en los que pasaron miedo.