Por el estado de la piedra ornamental

Investigadores de la Universidad diseñan un método para evaluar las fracturas

31 oct 2019 / 12:32 H.

Los investigadores de los departamentos de Ingeniería de Telecomunicaciones y Geología de la Universidad de Jaén diseñaron un método no invasivo que permite analizar el estado interno de la piedra ornamental y detectar posibles fracturas o deterioros provocados por las condiciones ambientales a las que se expone. Aplicando la técnica del “impacto eco”, un sistema que utiliza el sonido para alertar de la existencia de una rotura en la roca y, por tanto, sirve como una medida preventiva.

La descomposición de los materiales basados en piedra ornamental es lenta y gradual, pero cuando se usan como elementos de construcción y se ven sometidas a cambios continuos de temperatura sufren una desintegración y aumenta la porosidad. “El daño interno de una roca es difícil de determinar una vez que las piezas, que se pueden cortar y tallar en diferentes formas y tamaños, se colocan en edificios o en revestimientos exteriores. Por ello, este método que aplica técnicas para evaluar la calidad interna de materiales de piedra ornamentales en una etapa temprana podría ser muy útil para el sector”, garantizó Pedro Vera, investigador de la Universidad de Jaén y responsable de este estudio.

Esta nueva herramienta se basa en la medición y estimación de la velocidad de propagación de las ondas acústicas que produce el golpe dirigido con pequeñas bolas de acero sobre la piedra. De esta forma, se genera una vibración en el interior que emite una frecuencia de sonido y que según las condiciones físicas de la roca será mayor o menor. La recogida de estos datos se realiza después de un proceso mecánico bajo supervisión consistente en la repetición de diversas pruebas que recrean los efectos de dilatación y contracción que soporta una piedra al aire libre. En concreto, se somete a diferentes ciclos de congelación y descongelación para establecer una correlación con el daño interno causado en el material. “Con estos ensayos en laboratorio queremos conseguir que la roca muestre su evolución”, explicó Vera.