Toca hablar de ella
Es la semana de María Jesús Montero, quien el domingo se convertirá en secretaria general del PSOE de Andalucía con un equipo nuevo en el que se espera que haya nombres de Jaén
Ese es el mensaje, la directriz, la consigna y el mandamiento para evitar el infierno: toca hablar de María Jesús Montero. Ni una palabra más. Los disciplinados con la doctrina achantan la mui y, con el respeto debido al aparato y a la militancia, callan y, sin embargo, hay quienes no otorgan. Es la semana de la vicepresidenta del Gobierno y vicesecretaria general del Partido Socialista. El domingo próximo subirá a las alturas del socialismo en Andalucía y, una vez bendecida, tocará el momento de apagar el fuego encendido en las provincias, en todas salvo en la excepción que confirma la regla: Sevilla. Todas las miradas están puestas, ahora, en el equipo que conformará la nueva dirección regional, cuyos nombres y apellidos, por muchas cávalas y cuentas de la vieja, no se conocerán hasta cuarenta y ocho horas antes del congreso andaluz que se prepara en Armilla.
Ese es, precisamente, otro capítulo brillante de una película cuyo final es una atractiva incógnita para los disfrutones de la política. ¿Habrá jiennenses en el organigrama orgánico del socialismo andaluz? La respuesta no puede ser otra: sí. La escenificación de Granada dejará constancia de que Jaén no es una provincia cualquiera, en consonancia con una comunidad convertida en el ojito derecho de Pedro Sánchez, quien mantiene una apuesta personal para conseguir una jugada redonda en las próximas elecciones autonómicas. Si Juan Francisco Serrano no puede ser, por motivos más que evidentes, estará al quite Julio Millán, como buen perfil de alcalde joven y preparado para las batallas que tengan que venir. Todo es compatible en la vida, o casi todo. Habrá más en el interesante tablero, cada uno en su nivel.
El caso es que el cónclave del próximo fin de semana se presenta como una balsa de aceite en lo que a la Secretaría General del PSOE de Andalucía se refiere. Sin embargo, nadie puede negar que la intensidad se centrará en el liderazgo de las provincias. María Jesús Montero quieren agilidad en la renovación y, si en abril tiene que estar todo cerrado, marzo no pasará a la historia como un mes cualquiera. El problema es que hubo quienes se adelantaron al calendario establecido y desenfundaron las espadas a destiempo para romper con esa Ley del Silencio que suele sentar cátedra. El ejemplo más claro está en Jaén. Francisco Reyes abrió el melón de su relevo, pegó el acelerón con un comité provincial extraordinario y la concatenación de sucesos inesperados hizo que diera el frenazo en lo que dura un suspiro. Toca hablar de María Jesús Montero.
El trasfondo de lo que ocurre en la provincia es que nadie quiere estrenar las urnas de unas elecciones primarias. La portavoz en el Parlamento, Ángeles Férriz, está dispuesta a llegar hasta el final en un proceso en el que, por el momento, tiene un rival, no por ello enemigo. Se trata del alcalde de Arjona, Juan Latorre, quien recaba apoyos entre la militancia en busca de una sucesión tranquila. Autodescartado queda el máximo dirigente municipal de Marmolejo, Juan Lozano, quien no tuvo ni que deshojar la margarita para saber a quién le pide el cuerpo apoyar. La recta final de febrero despejará las dudas de las posibles candidaturas y, aunque en la terna todavía aparece el actual secretario general del PSOE de Jaén, lo más probable es que, finalmente, haya una lista única, como siempre, porque no es la primera vez que hay pelea interna, con envolvente incluida, y final feliz sin primarias. Que se lo digan a Fernando Calahorro, a Cristóbal López Carvajal y a Gaspar Zarrías en sus respectivas etapas. Desempolvar las hemerotecas es, en ocasiones, más duro que rescatar las urnas del trastero. La Historia.

Miguel Moreno no se rinde: carta a los alcaldes de Jaén y Córdoba
No se rinde. El alcalde de Porcuna, Miguel Moreno, dejó pasar la temporada de aceituna para volver a la carga con la necesidad de convertir en autovía la A-306, una patata caliente para los dirigentes del Partido Popular cuyos municipios transcurren por esa carretera por motivos evidentes que conviene resaltar: quieren el proyecto, pero no pueden situarse en contra de la Junta de Andalucía. Sin embargo, él, que no se casa ni con unos ni con otros y que tiene la mirada siempre puesta en sus vecinos, escribe una carta a los alcaldes de Jaén —del PSOE— y de Córdoba —del PP— para intentar reconducir el futuro de una infraestructura propia de otros tiempos, porque por más arreglos e inversiones, no hay más que un carril de ida y otro de vuelta para unir dos provincias vecinas. El alcalde de Ciudadanos pone de relieve, en su misiva, que “se hace imposible circular” por esta carretera, punto en el que lamenta que “la última reforma” ejecutada en 16 kilómetros del término municipal de Torredonjimeno ha supuesto “una chapuza”. Intentó conseguir el apoyo de los alcaldes a través de una plataforma creada a tal efecto, pero la mayoría se puso de perfil, excepto los que forman parte del Partido Socialista.
EN CORTO. Primer toque de atención de Jaén Merece Más al PSOE
Lo hicieron. Estaban los responsables de Jaén Merece Más inmersos en una balsa de aceite con el Partido Socialista, desde la moción de censura en el Ayuntamiento de Jaén, hasta que, en los prolegómenos del Día de los Enamorados, lanzaron su primera carta de desamor contra sus socios de gobierno. Es un toque de atención por su negativa a respaldar la conversión de Nacional 432 en la autovía A-81 y el apoyo al Ejecutivo central de la concesión de un crédito de más de 750 millones de euros a Marruecos para la adquisición de 40 trenes. Esto no quiere decir más que Jaén Merece Más está para lo que debe estar: reclamar lo que es de recibo para la provincia y quienes habitan en ella. Con unos y con otros.